CRÓNICAS DE PUERTO LIBRE (1996)
Por José Arrieta González
El taller artesanal Puerto Libre está ubicado en Corozal, Sucre. Nació de la necesidad de estar presentes en los festivales de la región, para conocer y aprender de sus protagonistas todos esos secretos que guarda nuestra música y folclor.
Fue así como en Ovejas, en octubre de 1992, en el marco del Octavo Festival Nacional de Gaitas, despega oficialmente Artesanías Puerto Libre. Recuerdo que algunos integrantes de grupos musicales y de danza se fueron con el deseo de llevarse sus prendedores folclóricos, pues gustaron tanto que se agotaron rápido. Estos prendedores fueron gaitas hembras y macho en miniatura, adornados con el tricolor nacional.
Después elaboré cajas, guacharacas y acordeones, para llevar al festival de acordeones de San Juan Nepomuceno, que se realizó en los primeros días del mes de diciembre del mismo año. Luego, estuve en el Festival Folclórico de la Algarroba, celebrado en el mes de enero en Galeras; allí fui invitado para inicios de abril al Festival Nacional de la Cumbiamba, en Cereté, donde llevé gaitas y tambores.
Ya había recorrido varias ciudades de Sucre, Bolívar y Córdoba pero quería conocer más, fue así como a fines de abril de 1993 fui al XXVI Festival de la Leyenda Vallenata en Valledupar y cada vez me convencía más de que podía hacer de este trabajo una actividad lucrativa sin alejarme de mi propósito inicial.
Continuaron las giras y cada día nuevas creaciones, como las de los Pendientes Folclóricos que son fajas de maguey y de hilo de hamaca decoradas con los instrumentos musicales y por supuesto nuestra bandera. También pisapapeles, dijes y llaveros, todos en miniatura enmarcados en el folclor.
La primera vez que asistí al Festival Cuna de Acordeones,, en Villanueva, Guajira, fui invitado al festival del Río de la Magdalena que se realiza en noviembre en Barrancabermeja donde me invitaron a otros festivales que he visitado del interior del país. Otros de los festivales que he visitado son los de Chinú, San Antero, San Onofre, Tolú viejo, Sampuñes, Morroa, San Jacinto, Arjona, Turbaco, Cartagena, Calamar, Campo de la Cruz, Barranquilla, Pivijay, Medellín, Caucasia y Bogotá, entre otros.
Aparte de los festivales, en vitrinas de importantes casas artesanales se pueden conseguir Las Creaciones de Artesanías Puerto Libre. También he sido llamado para realizar trabajos a gusto de los solicitantes, como la colección Costa Norte para el personal de producción de Telecaribe, los pines para un evento de capacitación organizada por la Cámara Junior, Capitulo Sincelejo, un mural titulado Recorriendo a Cereté, hoy ubicado en el lobby del Hotel Cacique, en Cereté, Córdoba y otros.
Los materiales básicos utilizados en Artesanías Puerto Libre son arcilla, cemento, hilos y tejidos de hamaca y maguey, papel, talco industrial, brea, cañas, guaduas y madera.
Una de las cosas más importantes de Artesanías Puerto Libre, es que me ha permitido cosechar una gran cantidad de amigos, desde el más modesto de los participantes, hasta grandes organizadores y juglares, a lo largo y ancho de la Costa Norte Colombiana y parte del interior del país. Uno de ellos me decía que “en cada una de las artesanías de Puerto Libre era una pieza musical para escucharla con los ojos”.
De todos los festivales visitados puedo decir que el denominador común es el trato amable, calidez y hospitalidad de sus gentes, y la tranquilidad en que transcurre el evento, lo que me deja claro que por los caminos del folclor, también camina la paz.
El taller artesanal Puerto Libre está ubicado en Corozal, Sucre. Nació de la necesidad de estar presentes en los festivales de la región, para conocer y aprender de sus protagonistas todos esos secretos que guarda nuestra música y folclor.
Fue así como en Ovejas, en octubre de 1992, en el marco del Octavo Festival Nacional de Gaitas, despega oficialmente Artesanías Puerto Libre. Recuerdo que algunos integrantes de grupos musicales y de danza se fueron con el deseo de llevarse sus prendedores folclóricos, pues gustaron tanto que se agotaron rápido. Estos prendedores fueron gaitas hembras y macho en miniatura, adornados con el tricolor nacional.
Después elaboré cajas, guacharacas y acordeones, para llevar al festival de acordeones de San Juan Nepomuceno, que se realizó en los primeros días del mes de diciembre del mismo año. Luego, estuve en el Festival Folclórico de la Algarroba, celebrado en el mes de enero en Galeras; allí fui invitado para inicios de abril al Festival Nacional de la Cumbiamba, en Cereté, donde llevé gaitas y tambores.
Ya había recorrido varias ciudades de Sucre, Bolívar y Córdoba pero quería conocer más, fue así como a fines de abril de 1993 fui al XXVI Festival de la Leyenda Vallenata en Valledupar y cada vez me convencía más de que podía hacer de este trabajo una actividad lucrativa sin alejarme de mi propósito inicial.
Continuaron las giras y cada día nuevas creaciones, como las de los Pendientes Folclóricos que son fajas de maguey y de hilo de hamaca decoradas con los instrumentos musicales y por supuesto nuestra bandera. También pisapapeles, dijes y llaveros, todos en miniatura enmarcados en el folclor.
La primera vez que asistí al Festival Cuna de Acordeones,, en Villanueva, Guajira, fui invitado al festival del Río de la Magdalena que se realiza en noviembre en Barrancabermeja donde me invitaron a otros festivales que he visitado del interior del país. Otros de los festivales que he visitado son los de Chinú, San Antero, San Onofre, Tolú viejo, Sampuñes, Morroa, San Jacinto, Arjona, Turbaco, Cartagena, Calamar, Campo de la Cruz, Barranquilla, Pivijay, Medellín, Caucasia y Bogotá, entre otros.
Aparte de los festivales, en vitrinas de importantes casas artesanales se pueden conseguir Las Creaciones de Artesanías Puerto Libre. También he sido llamado para realizar trabajos a gusto de los solicitantes, como la colección Costa Norte para el personal de producción de Telecaribe, los pines para un evento de capacitación organizada por la Cámara Junior, Capitulo Sincelejo, un mural titulado Recorriendo a Cereté, hoy ubicado en el lobby del Hotel Cacique, en Cereté, Córdoba y otros.
Los materiales básicos utilizados en Artesanías Puerto Libre son arcilla, cemento, hilos y tejidos de hamaca y maguey, papel, talco industrial, brea, cañas, guaduas y madera.
Una de las cosas más importantes de Artesanías Puerto Libre, es que me ha permitido cosechar una gran cantidad de amigos, desde el más modesto de los participantes, hasta grandes organizadores y juglares, a lo largo y ancho de la Costa Norte Colombiana y parte del interior del país. Uno de ellos me decía que “en cada una de las artesanías de Puerto Libre era una pieza musical para escucharla con los ojos”.
De todos los festivales visitados puedo decir que el denominador común es el trato amable, calidez y hospitalidad de sus gentes, y la tranquilidad en que transcurre el evento, lo que me deja claro que por los caminos del folclor, también camina la paz.
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